Las filtraciones de las actas de ETA del bar Faisán no provienen de la banda, según Interior

 

Los duros de ETA quieren acciones contundentes para doblegar al Gobierno. Entre esas acciones se incluye el secuestro. ¿Cómo lo gestionaría el Gobierno? ¿Aplicaría el mismo criterio que con el Alakrana? No tiene nada que ver, seguiríamos el mismo criterio que con el de Miguel Ángel Blanco, señalan a Hispanidad fuentes oficiales de la lucha antiterrorista del Ministerio del Interior.
Por otra parte, dichas fuentes consideran que el anuncio preventivo de Rubalcaba fue muy eficaz. A los duros, los paralizó porque no saben hasta qué punto sabemos. A los blandos, les rebotó contra la banda. Muchos dicen que fue una intoxicación de Rubalcaba, que la banda no quiere eso, señalan desde Interior.
¿Cómo se interpreta desde Interior la frase de Zapatero de que el proceso de paz debilitó a Batasuna? Interior apoya al presidente. Reconoce que el proceso de paz fue un error, pero considera que la buena gestión de Inteligencia ha permitido convertirlo en un boomerang. Muchos de las bases culpan a la banda de no haber aprovechado la oportunidad.
El objetivo del Gobierno es el aislamiento social de ETA y la grapización de la banda. Y el entusiasmo es mucho. Los duros apenas llegan a 100 y van a ocurrir cosas en los próximos meses, señalan desde Interior. El mensaje es el de siempre: o votos o pistolas. Si hay entrega de armas y convencimiento de que la vía armada está cerrada, podrán participar en las elecciones del 2011. Sino, caña al mono.

Por último, dichas fuentes aseguran que las filtraciones de las actas de ETA sobre el bar Faisán no proceden de la banda sino de sindicatos policiales.