Salvo excepciones, Hispanidad no publica anónimos. Esta vez vamos a hacer una excepción, dado que el remitido lo merece, y también porque muchos de los puntos, comprobables que denuncia, han sido cotejados por la redacción de este diario electrónico con empleados del Santander y operadores del mercado que intervinieron en la operación Acciona, y hemos comprobado que son rigurosamente ciertos. Ahora bien. No podemos ofrecer contraste sobre el conjunto de la denuncia, quede claro.

En cualquier caso, el remitente se identifica como trabajador de Santander y describe pormenorizadamente cómo las filial de Bolsa de Emilio Botín preparó la operación Acciona, operación que E.ON ha llevado a los tribunales en Estados Unidos. No necesita glosa alguna.

El caso que denuncio es que Botín utiliza su filial de Bolsa para manipular sin escrúpulos a inversores, cotizaciones, etc. y tiene a la CNMV que no quiere enterarse de nada. En el caso Acciona, ya ha sido espectacular, E.ON tiene toda la razón en la denuncia que ha presentado en Estados Unidos. Santander no quiere perder su influencia en Endesa (es su principal cliente corporativo) frente a los bancos alemanes y se decidió a ayudar a Acciona a cualquier precio.

Los hechos son los siguientes. Una vez que Botín y Entrecanales deciden la operación, el primero da mandato a su equipo de Santander Bolsa para que organice una campaña de manipulación del precio de Endesa para garantizar el éxito de la entrada de Acciona. El Gobierno estaba al tanto de todo porque la sobrina de Miguel Sebastián trabaja en esta división del banco Santander (¿casualidad?).

La operación la montan el consejero delegado Juan Manuel Sanromán (sorprendentemente promovido ahora dentro del banco), Gabriel Alvarez (jefe del equipo de ventas) y Jesús Gómez (jefe de análisis). Los tres deciden lanzar unos días antes de la oferta de Acciona una campaña de desprestigio del valor de Endesa, para garantizar que los inversores vendieran sus acciones sin oposición a Acciona. Para ello, ordenan al analista Bosco Muguiro preparar unas presentaciones en Londres y otras ciudades extranjeras en las que se daría una visión muy negativa sobre la regulación en España, el equipo gestor de Endesa, la estrategia, etc. Este analista llegaba a decir que Endesa solo valía 25 euros, por debajo de su precio en ese momento de mercado, y que el equipo gestor de Endesa era el peor del sector en Europa. Esta manipulación a los analistas del banco se ha producido en otros casos, pero esa es otra historia. Los analistas tienen miedo, están muy bien pagados y obedecen.

El siguiente paso se produce unos días después cuando el banco empieza a tantear al mercado sobre el precio al que los inversores estarían dispuestos a vender sus acciones de Endesa. Se llega a la conclusión de que a 32 euros muchos hedge funds venderían, después de haber hecho una buena plusvalía. El resto es publico, con el gran éxito que la operación implica para Acciona, para Santander y para el Gobierno.

Con esta operación, Santander ha vuelvo a romper todos los códigos éticos del mercado, ha manipulado a los inversores y, de momento, nadie ha tomado cartas en el asunto.

Espero que esta información sirva para desenmascarar estas prácticas, que fueron habituales en los bancos americanos hace años y que en España se mantienen con total impunidad. En su denuncia en Estados Unidos, E.On señala esta situación, porque muchos accionistas de Endesa a los que visito Santander son también accionistas de E.ON y pusieron en conocimiento de la empresa alemana este intento de manipulaciones. Eso explica también la rápida respuesta de E.ON, ofreciendo 35 euros.

No tengo ningún deseo de revancha, ni de dinero, pero esto hay que denunciarlo para el bien del banco, que esta totalmente controlado por una familia que sólo tiene un puñado de acciones. Esta información voy a mandarla a otros medios, aunque no estoy seguro de que se atrevan a publicarlo.

Un empleado que quiere lo mejor para este gran banco.