• Asegura que si lo hace, estaría subvencionando a los interesados en el corredor del Levante.
  • Lo dice justo la semana en la que Fomento está manteniendo reuniones con los potenciales operadores para conocer sus condiciones.
  • Y la más importante es reducir las tasas por circular por las vías de Adif.
  • Según los privados, si se mantienen los peajes actuales, los números no salen y el concurso podría quedar desierto.
  • El presidente de Adif aboga por que el AVE una distancias de 200 ó 250 kilómetros para rentabilizar las elevadas inversiones en alta velocidad.

En plenas conversaciones entre Fomento y los interesados en pujar por la línea del AVE a Levante, el presidente de Adif, Gonzalo Ferre (en la imagen), se ha despachado este miércoles con unas declaraciones que, con toda probabilidad, no han sentado nada bien en el ministerio que dirige Ana Pastor.

Ni corto ni perezoso, Ferre ha asegurado que no bajará las tasas para que los operadores privados puedan participar en la liberalización del corredor del Levante. Pero lo más grave viene ahora: "Si las bajásemos, estaríamos subvencionando con dinero del contribuyente actividades de terceros". Es decir, si las baja, cualquiera podría denunciar al Gobierno ante Bruselas por entender que está subvencionando una actividad privada.

No ha arreglado nada lo que ha declarado después: "Si el Gobierno decide bajarlos (los cánones), Adif lo hará", aunque "no parecería razonable".

Como ya adelantó Hispanidad, los interesados en operar el AVE a Levante habían exigido a Fomento rebajar las tasas de Adif. Y es que con los cánones actuales, los números no salen y el concurso podría quedar desierto. Y Pastor no está dispuesta a que eso ocurra. "Somos los primeros interesados en que esto (la privatización del AVE) salga bien", afirmó Rafael Catalá pocos días antes de abandonar la secretaría de Estado de Infraestructuras.

Pero Ferre no está dispuesto a que la privatización salga bien a cualquier precio. Las inversiones para construir las vías del AVE son demasiado elevadas. Por eso ha reconocido que "hay que echar mucha imaginación" para rentabilizarlas. Entre las medidas que se podrían tomar, según Ferre, está la de unir mediante el AVE distancias de 200 ó 250 kilómetros. Se haría en el mismo tiempo que se emplea actualmente para unir dos destinos separados por 50 ó 60 kilómetros. En definitiva, como afirma Ferre, se trata de "inventarse nuevas relaciones de Cercanías".

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com