A pesar de que encadenamos el quinto mes consecutivo con inflación negativa

Todo el mundo niega que España pueda caer en deflación. Lo niega el gobierno, por supuesto. Pero también el Banco de España y Funcas. Argumentan que lo que ocurre es que la estadística engaña porque el precio del petróleo fue muy alto el año pasado y que por lo tanto distorsiona la cifra. No hay deflación en la subyacente. Falso. Sí la hay. Acumulamos 5 meses consecutivos de inflación negativa. Y bajando. De manera creciente.

Técnicamente, según el FMI hay deflación cuando se producen seis meses seguidos de inflación negativa. A nosotros nos tocaría el mes siguiente. Y todo parece apuntar a que así va a ser. Aún así, todos los organismos apuntan que aunque se produzca ese sexto mes, a finales de año tendremos inflación positiva. Pero técnicamente estaremos en deflación.

Y eso significa que las ventas se ralentizan a la espera de bajadas adicionales, lo que obliga a bajadas adicionales para liberar stocks, y eso significa recortes en los resultados y por tanto en la producción y en el empleo. O sea, un círculo absolutamente penoso.