• Rafael Torres defiende que le habría gustado que "no viniese capital extranjero a completar Deoleo".
  • Discrepa con que no hubiera vendido, como Bankia o BMN, sus participaciones para que la aceitera "no perdiese la identidad nuestra".
  • Por cierto, Aires Cañete, hoy lunes, en su último Consejo de Agricultura y Pesca de la UE, no ha dicho ni 'mu' de Deoleo.

El Consejo de Ministros del pasado viernes fue un esperpento, teniendo en cuenta que estaba presente el ministro saliente de Agricultura, Miguel Arias-Cañete, y ningún periodista le preguntó por Deoleo, la gran aceitera que está dejado de ser española tras la compra de CVC, un fondo especulativo. Los medios, en una extraña alianza fantasma con el Gobierno -debido a la ausencia de crítica con la operación- callan y pocos más hablan. Por eso se agradecen declaraciones como las de esta mañana de Rafael Torres (en la imagen), presidente de la Fundación Horizonte XXII Globalcaja, que agrupa a las cajas rurales de Albacete, Ciudad Real y Cuenca y la de La Roda.

Torres ha señalado lo desearía mismo que mayoría de españoles, pero que ningún político eleva a la categoría de tesis. A Torres le "gustaría que Deoleo fuese mayoritariamente española y que no viniese capital extranjero a completarla". Hay que recordar que el plan de la Sepi se desinfla y que no comprará el 23% de Deoleo sino el 2,9%.

Es lo que no han pensado entidades accionistas integrantes de la aceitera -Bankia y BMN-, que acordaron la venta de un paquete accionarial a la británica CVC Capital Partners. A Torres, por el contario, admitiendo que el dinero puede venir de cualquier sitio, le gustaría que la aceitera "no perdiese la identidad nuestra y que fuese una empresa mayoritariamente española".

El problema en España, en relación a cualquier producto, ha añadido Torres, no está en la producción, sino en la comercialización. "Evidentemente dentro del sector agroalimentario estamos exportando más y el crecimiento que ha habido ha sido exponencial, pero ahora ese producto hay que comercializarlo bien. Nos tienen que pagar su justo precio, no podemos estar al precio que nos quieran poner otros".

El ministro saliente de Agricultura, Arias-Cañete, por cierto, ha estado ausente respecto a la venta de Deoleo. Parece no preocuparle mucho, ahora que mira ya todo en clave para las elecciones europeas. A ver qué dice en los mítines. En la mañana de este lunes, en su último Consejo de Agricultura y Pesca de la UE, ha destacado su labor de "defensa laboriosa y constante de los intereses españoles" en su etapa al frente del ministerio (la reforma de la política agrícola común (PAC) o la pesquera", pero ni mu de Deoleo.

Mariano Tomás

mariano@hispanidad.com