Gallardón reconoce que Madrid 2016 costó 16,8 millones de euros

Montoro sale en defensa del alcalde, precisamente él, segundo de Rato, que abroncó al alcalde por subir impuestos Justifica el aumento de impuestos en Madrid pero no en España
Cuando Montoro riza el rizo pierde credibilidad. En el foro celebrado por Cinco Días, el responsable económico del PP insistió en criticar las subidas de impuestos del Gobierno, pero defendió la tasa de basuras con la que Gallardón ha decidido sangrar a los madrileños. De pronto, Montoro aplicó el retruécano eufemístico para explicar la actitud del alcalde de Madrid: los madrileños pagarán una tasa por prestación de servicios, no un impuesto. Como cuando la vicepresidenta dice que lo que va a aplicar es un ajuste fiscal. Dicho así, incluso da gusto pagar.

Montoro habla de las distintas sensibilidades del partido, pero en tiempos de Rato, el PP era aficionado a subir las tasas (por ejemplo las aeroportuarias) aunque presumiera de bajar impuestos. En 2003 el propio vicepresidente económico abroncó a Gallardón por la subida del IBI recordándole que el ideario del PP consiste en reducir impuestos, no en subirlos.

Se suponía que la tasa de basuras iría agrupada en un solo impuesto, bien junto al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), bien junto al Impuesto de Actividades Económica, cuya eliminación anunció el PP. Pero las veleidades olímpicas del alcaldísimo, que le permitirían aspirar a puestos más elevados, tendrían que ser financiadas de alguna manera y a la ciudadanía no le gusta. Gallardón ha reconocido en la mañana de este jueves que la candidatura costó a los contribuyentes 16,8 millones de euros.