No se sabe si lo conseguirá, pero al menos lo ha intentado. El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón ha hecho todo lo posible para que su amigo Florentino Pérez, presidente del Real Madrid y de ACS-Dragados, se haga con las obras de remodelación de la M-30, las mismas que amenazan con convertir a 6 millones de madrileños en clientes de los psiquiátricos, la misma que ya ha hecho famoso el comentario del actor Danny de Vito : Madrid será una ciudad muy bonita cuando el alcalde encuentre el tesoro.

Pues bien, al concurso de Calle30 (así se llama la sociedad para remodelar la circunvalación madrileña) ha contado con varias ofertas. La mejor, es decir, la que menos le gusta al consistorio, fue presentada por SyV, que se comprometería a hacer trabajo y mantenimiento por 4.564 millones de euros. Luego iba FCC-Abertis, que ofrecía 4.727 millones. En tercer lugar, ACS, con 4.755 millones, mientras Acciona se quedó en los 5.075 millones. Dado que la oferta económica pondera un 60%, los técnicos lo tenían claro : o SyV o FCC, Florentino en ningún caso. Y fue entonces (jueves 21) cuando se aplazó la resolución y cuando el tribunal comenzó a decirle a SyV y FCC que ofrecían muy poco por el mantenimiento, y que por tanto sus ofertas representaban una baja temeraria. Las respuesta de ambas fue unánime: oiga, es que nosotros apostamos por el conjunto : podemos perder en algunos puntos si ganamos en otros.

Y es que Florentino, el amigo de Gallardón, el amigo de Fernández Tapias, el empresario que más influye en Gallardón, pretende apurar demasiado el duro.