Se han producido dudas hasta el último momento, pero, al final, se ha impuesto lo que podríamos llamar el ala dura del Partido Popular. El primer partido de la oposición no firmará las conclusiones de la Comisión del 11-M. Su presidente, Mariano Rajoy, quiso dejarlo claro. Para él, el informe de la Comisión es fraudulento y partidista.

En vísperas del primer aniversario de los atentados del 11-M, la situación política en España adquiere un nuevo sesgo. Se generaliza el todos contra el PP o, si lo prefieren, el PP contra todos.