• Los conservadores de la Unión por el Movimiento Popular arrebataron al PS las alcaldías de más de un centenar de ciudades.
  • Aunque los socialistas lograron mantener los ayuntamientos de ciudades importantes como París, en donde gobernará por primera vez una mujer: Anne Hidalgo, de origen español. 
  • Para el relevo del primer ministro suena el actual titular de Interior, Manuel Valls, también de origen español.
  • Notable ascenso del ultraderechista Frente Nacional liderado por Marine Le Pen, que se hace con el control de al menos 11 ciudades de más de 9.000 habitantes. 
El Partido Socialista de Francia -o lo que es lo mismo François Hollande (en la imagen)- sufrió ayer domingo una histórica derrota en la segunda vuelta de las elecciones municipales y su primera derrota electoral desde 2007. Todos se preguntan y ¿ahora qué, ¿habrá remodelación del Gobierno y le costará el cargo al primer ministro, Ayrault Si algo tienen claro todos los analistas es que el resultado responde a un castigo al actual Gobierno.
Los grandes beneficiados fueron los conservadores de la Unión por el Movimiento Popular, que arrebataron al PS las alcaldías de más de un centenar de ciudades, algunas de ellas de la importancia de Toulouse, Limoges, Bastia, Ajaccio, Pau, Tours, Angers, Reims, Quimper o Saint-Ettiene.
Según los resultados provisionales, los socialistas perderían la mayoría en al menos 155 ayuntamientos. No obstante, los socialistas lograron mantener los ayuntamientos de ciudades importantes como Lyon, Lille, Estrasburgo, Dijon, Rennes, Nantes, Poitiers, Rouen Aviñón o la capital, París, en donde gobernará por primera vez una mujer: Anne Hidalgo, nacida en Cádiz.
Según la proyección de los resultados oficiales, el centroderecha habría conseguido el 45% de los votos frente al 43% de los socialistas y sus aliados ecologistas, mientras que la ultraderecha sumaría el 7% de los apoyos.
También hay que destacar la abstención récord del 38,5%, casi un punto y medio por encima del 36,45% registrado hace una semana, y una elevada tasa de votos nulos.
El primer ministro, Jean-Marc Ayrault, reconoció anoche la derrota sufrida por su partido en las urnas y dijo que "el mensaje es claro, y debe ser plenamente escuchado. Acepto mi parte de responsabilidad". Los analistas no descartan que el presidente François Hollande responda al voto de castigo sufrido en su primer examen electoral desde que accedió al Elíseo, en mayo de 2012, con una remodelación de su Gobierno que incluiría el relevo de Jean-Marc Ayrault. Para ese relevo suena el actual ministro del Interior, Manuel Valls, también de origen español.
Los comicios también certificaron el notable ascenso del ultraderechista Frente Nacional liderado por Marine Le Pen, que se hace con el control de al menos 11 ciudades de más de 9.000 habitantes. La líder del Frente Nacional celebró lo que consideró un "triunfo histórico" para su partido, que pasa de los 60 concejales logrados hace seis años a 1.200. "Hemos entrado en una nueva fase, el duopolio de la política francesa se ha roto con una nueva fuerza", afirmó. Sin embargo, el FN fracasó en su intento de hacerse con la alcaldía de Perpiñán, donde su vicepresidente, Luis Aliot, fue claramente derrotado por el conservador Jean-Marc Pujol (UMP). Tampoco logró la de Aviñón, donde la socialista Cécile Hele recuperó el terreno perdido en la primera vuelta.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com