Para evitar conspiraciones

 

Increíble, pero cierto. Exteriores desconfía de sus diplomáticos. Así que ha decidido prohibirles el uso de su correo personal desde su puesto de trabajo. Por supuesto lo han 'vendido' como la necesidad de incrementar la productividad. La realidad es que se trata de recortar los ánimos conspirativos. Porque el ambiente de Exteriores es extraordinariamente tenso, las divisiones son muchas y las tentaciones conspirativas son todas. Sobre todo porque muchos diplomáticos de carrera están hasta el gorro de que el Gobierno nombre embajadores de carácter político.