No aceptan la tasa para financiar a los Señores de la prensa con cargo a la telefonía

Llevarán al Gobierno a Bruselas y a los tribunales españoles. Y ojo, porque es sencillo que paralicen la recaudación, y entonces... Mientras, el oligopolio de editores a lo suyo: ahora quiere que también a las públicas autonómicas supriman la publicidad: ¿otro impuesto?
Hay que reconocerle al presidente -¿o era director general de RTVE- Luis Fernández su punto de osadía al enfrentarse a la todopoderosa vicepresidenta primera del Gobierno, Teresa Fernández de la Vega, porque todos los españoles debemos felicitarnos de que doña Teresa no cuente con un cuerpo paramilitar de choque: seguramente haría uso de él en cuanto alguien se atreviera a contradecirle. Ayer lo dejó claro en el telediario.

RTVE fue ayer la única televisión que emitió el siguiente informe sobre el enfado de anunciantes acerca de la medida gubernamental, no para financiar RTVE sino para ganarse el favor de los grandes editores a costa de las telecos.

Ya saben ustedes: la TV pública se verá obligada a reducir su publicidad, pero será financiada por el dinero que el Estado obtendrá del nuevo impuso a las telefónicas. Así, la publicidad que no vaya a RTVE se la repartirán las privadas: los señores de la prensa están contentos y eso lo ha logrado la vicepresidente primera, tan loada en los grandes multimedia, a pesar de ser la feminista radical más peligrosa del Zapatismo así como una mentirosa compulsiva.

Sólo que a Luis Fernández no le gustan las limosnas, y está dispuesto a hacer valer su descontento: a lo mejor le cuesta el puesto.

Y el otro damnificado, las teleoperadoras de Telecomunicaciones, siempre tan serviles ante la autoridad gubernamental, también se han cansado: quieren llevar al Gobierno ZP ante los tribunales comunitarios y cuentan con el apoyo de la Comisión Europea, porque no parece buena política esa de ir creando impuestos a los sectores económicos que van bien simplemente por el hecho de que van bien y con el no muy noble objetivo de evitar toda crítica televisiva.

Y no lo duden, Internet y, la prensa y la radio se dividen en medios gubernamentales y antigubernamentales. Por contra, en España, los canales de TV, con la excepción de los autonómicos controlados por el Partido Popular, son todos ellos, pro-zapatistas. Pero ahora Fernández se rebela.

De cualquier forma, la rebelión más prometedora contra el Zapatero viene por la vía de las propias operadoras agrupadas en Redtel, que no se achantan ante el Gobierno y han abierto brecha con un duro comunicado en el que se hace alusión, sólo alusión, a la parte mollar del invento: Vodafone, Telefónica, Orange y compañía se disponen a llevar al Gobierno ZP ante los tribunales comunitarios y ante los españoles por la vía del contencioso. En Bruselas están felices, porque no les gusta nada que los gobiernos creen nuevos impuestos sin consenso comunitario, y mucho menos para ganarse el favor de los editores. Además, representa una cuña de Kirchnerismo. De la misma forma que La Casa Rosada decidió meterle un rejón a los productores de soja por la sencilla razón de que les iban bien las cosas, La Moncloa decide colocarle las banderillas a las operadores de telecomunicaciones por la sencilla razón de que... les va bien. No les obliga a bajar precios o a dar mejor servicio o a acelerar la digitalización de España, sino que crea un nuevo impuesto para adular a los propietarios de canales de TV y contar así con su apoyo propagandístico, clave de la estrategia zapatista.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com