Manuel Conthe se convertirá esta semana en el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y Carlos Arenillas será su número dos con categoría de vicepresidente.

Mucho se ha hablado de estos nombramientos, dada la comatosa situación de la CNMV tras la etapa Blas Calzada. De entrada, hay que recordar que Carlos Arenillas es el esposo de Mercedes Cabrera, número dos en la lista del PSOE por Madrid, justo detrás de Rodríguez Zapatero. Pero Arenillas ha sido siempre un intermediario especialista en mercados monetarios y uno de los grandes impulsores del Grupo CIMD-Intermoney. Allí tuvo a sus órdenes al actual secretario de Estado de Economía, David Vegara, así como a Miguel Sebastián, actual asesor económico de Zapatero en Moncloa. El propio Arenillas fue uno de los animadores del programa económico del Partido Socialista. Carlos Arenillas cuenta ya con un estupendo patrimonio y, desde luego, es el personaje ideal para captar las trampas y trucos de los intermediarios financieros.

Por contra, el nuevo presidente de la CNMV tiene más experiencia en el sector público que en el privado. El último destino de Conthe ha sido Analistas Financieros Internacionales, siempre enfrentados a la gente de Intermoney. Conthe ha sido director general del Tesoro y directivo del Banco Mundial. Un tipo duro que no da los buenos días para no comprometerse, pero más capaz de dictar decretos u órdenes ministeriales, que de entender los mercados financieros.

Mucho se ha hablado de un Conthe que se negaba a aceptar a Carlos Arenillas como su segundo y que se empeñaba en llevarse como vicepresidente a su amigo íntimo, el actual secretario general del Banco de España José Antonio Alepuz. Ambos son amigos íntimos y ambos coincidieron en el Banco Mundial. Es más, lo curioso de esta amistad es que Conthe siempre ha trabajado para el PSOE, mientras que Alepuz es mucho más pepero. Pero no saquemos las cosas de quicio. Lo cierto es que cuando Conthe ofrece a Alepuz la Vicepresidencia de la CNMV, es el propio interesado quien prefiere mantenerse en el Banco de España.