Está dispuesto incluso a nacionalizar bancos y privatizar cajas de ahorros. Sin necesidad alguna, ha aceptado todas las medidas propuestas en Europa. En definitiva, no sólo se apoya a los ahorradores, sino a los especuladores, con la excusa de la crisis. Toda UE se rinde ante el poder de los ricos. Asusta que sea Gordon Brown quien proponga un nuevo Bretton Woods

Las bolsas europeas han saludado con subidas las medidas acordadas por los líderes de Eurolandia, medidas de las que el presidente del Gobierno español Rodríguez Zapatero -que compareció en rueda de prensa durante la mañana del lunes- ha comprado el 100 por 100.

George Bush fue más práctico: desde un primer momento decidió emplear el dinero público de los contribuyentes estadounidenses, y al menos el de la siguiente generación de norteamericanos, en devolverles a los especuladores de Wall Street el dinero que habían perdido y en salvar, tanto a los ahorradores como a inversores e instituciones.

En Europa, a lo mejor por vergüenza torera y porque los bancos europeos, especialmente los españoles, son menos especulativos que los americanos, se ha ido por fases, pero enseguida se ha acelerado la situación, a medida que los intermediarios financieros, los que provocaron la crisis en mayor o menor grado, continuaban con su chantaje a los Gobiernos: si quebramos, los ahorradores e inversores particulares, es decir, vuestros electores, perderán sus ahorros. Y las bolsas despeñándose.

Así, Irlanda, Dinamarca y Alemania aseguraron los ahorros de sus bancos. Los demás países se vieron obligados a mover ficha y, aunque el vicepresidente Solbes bramaba contra Irlanda, días después le imitaba, asegurando 100.000 euros por ahorrador.

Pero comer, rascar y sanear todo es empezar. Luego vino el fondo para dotar de liquidez al sistema. En principio, se trataba de comprar las emisiones de bancos y cajas, que no encontraban mercado. Así obtendrían dinero y podrían seguir financiando a las empresas. Nadie explicó por qué razón, si se trata de financiar a las empresas, y no a los bancos, el Gobierno no les ofrece directamente ese dinero a empresas y familias. No hay respuesta.

Concretemos:

El Gobierno pondrá 100.000 millones de euros para lo que queda de año. ¿Para el 2009? Todavía no tenemos una cifra, responde Zapatero. El acceso a estos avales del Estado estará limitado al visto bueno de la solvencia por parte del Banco de España. O sea, que digamos que el Banco de España calificará la calidad de las emisiones antes de que el Estado ponga el dinero encima de la mesa.

Por otra parte, el plan español está abierto a las filiales extranjeras situadas en España, pero siempre que tengan una actividad significativa. O dicho de otro modo: si alguien esperaba hacer las emisiones de su país con el aval de España, lo lleva crudo.

Zapatero insiste en que el coste para el contribuyente será cero. Si se hace bien y el sistema financiero responde, no tendrá coste para el contribuyente. Pero no explica que tendrá impacto en la calificación de nuestra deuda y por tanto en costes financieros en el futuro. Zapatero responde que eso les ocurrirá a todos los países que han tomado esta decisión, que son todos los del eurogrupo y que en todo caso, España tiene una ventaja competitiva que es el margen del escaso ratio deuda/PIB.

Zapatero, satisfecho por la coordinación de todo el eurogrupo. Una coordinación que ha citado en varias ocasiones y en la que se ha refugiado para responder a incómodas preguntas. No es peor que lo aprobado por Merckel. Por supuesto, los banqueros están satisfechos. Lo han recibido de manera muy favorable; entienden que va a cambiar el clima.

Más detalles:

  • Plazo máximo de vencimiento: 5 años.
  • Valoración del riesgo de las operaciones: Ministerio de Economía y Hacienda.
  • Valoración del precio de las entidades financieras: Ministerio de Economía y hacienda.

Pero hay más: con lo aprobado por el Consejo de Ministros extraordinario del lunes, resulta que el Gobierno español también utilizará fondos públicos para comprar activos tóxicos, es decir para que todos paguemos a los especuladores el dinero que nos han hecho perder.

Eso sí, como no podía ser de otra forma, la bolsa feliz: http://www.europapress.es/economia/fiscal-00347/noticia-economia-amplel-ibex-registra-mayor-subida-historia-1065-queda-puertas-10000-puntos-20081013182339.html. Veremos cuanto dura
Y hay más: el británico Gordon Brown da el último paso, por el momento, en este recorrido plutocrático, o puesta del dinero de todos al servicio de bancos e intermediarios financieros: el Gobierno español también está dispuesto a comprar acciones (o preferentes, que el fondo es lo mismo) y cuota participativas para las cajas.

Dicho de otro modo: el RD que desarrolla en España el acuerdo europeo también abre la puerta a la nacionalización parcial de los bancos. Zapatero ha señalado en rueda de prensa que se trata de una medida preventiva y cautelar y que ha sido incluido a propuesta del Ministerio de Economía aunque fue Solbes quien señaló que no sería necesario. A día de hoy no es necesario, pero si lo fuera, hemos preferido incorporar este nuevo instrumento, señala Zapatero.

Esto de las cuotas tiene su enjundia. Es el camino que pretenden todos aquellos al son que molesta el significado de las cajas de ahorros y que se empeñan en convertirlas en sociedades anónimas: acciones con derechos económicos pero sin derechos políticos. Sólo lo ha intentado la CAM., y ha fracasado estrepitosamente.

En otras palabras, al modo Brown, nacionalizar bancos y privatizar las cajas de ahorros. Todo con dinero del contribuyente para salvar a las entidades.

La Unión Europea, ciertamente, se ha rendido a los especuladores y amenaza con convertir la democracia en plutocracia, o Gobierno de los ricos. El británico incluso propone un nuevo Bretton Woods. Pero del BW de 1944 nació el FMI y el Banco Mundial. El segundo, una ONG, el primero, un banco donde los países ricos ponían más dinero para que los pobres paguen sus deudas... aunque a cambio de unos ajustes de cinturón a veces draconianos.

Pero es que ahora seguimos el camino justamente opuesto: son todos los contribuyentes los que pagan a los especuladores que han provocado la crisis para que el sistema no se derrumbe. ¿Qué sistema? El sistema de los ricos, naturalmente.