La solidaridad "de carne y hueso" empieza a evaporarse

 

España no es Grecia. Pero las incertidumbres griegas se trasladan sobre España. Francia y Alemania se hacen los remolones del plan de rescate de Grecia. La razón es que son bancos franceses y alemanes los que acumulan gran parte de la deuda griega. Y desde el FMI ya hay voces que plantean la necesidad de una quita para que Grecia pueda salir adelante. La situación está tensa. Papandreu afirma que quien apueste contra Grecia (quien se ponga corto contra la deuda griega), "perderá hasta la camiseta". Pero de momento ganan. Y mucho. Los especuladores de los CDRs hacen su agosto y la solidaridad "de carne y hueso" -que decía Papandreu- empieza a evaporarse.

El efecto contagio ha sido inmediato. Los bonos españoles cotizan con unos spreads que no veíamos desde 1998. ¿Eso qué significa? España es un riesgo si el antecedente griego no se confirma. Es decir, las cuentas de España no ofrecen seguridad por sí mismas, sino con la red que supone que si la UE salva a Grecia hará lo propio con España. Con esas juega Zapatero. Y por eso es el primero en ponerse en la lista de solidarios para rescatar a Grecia... y de paso especular con la operación y ganar 110 millones de euros.

Moratinos, asustado, afirma que la UE emprenderá el rescate aunque Francia y Alemania se hagan los remolones. ¿De verdad Moratinos cree que es posible hacer algo en la UE sin el consenso del eje franco-alemán? Suena más bien a pulso de los euroburócratas que a otra cosa. El problema es que Moratinos no pinta nada en la UE por mucho que España asuma este semestre la presidencia rotatoria.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com