• La Comisión Europea (CE) ha recomendado varias veces que nuestro país aumente el impuesto de algunos productos del 10% al 21% para aumentar la recaudación.
  • Miguel Ferre ha descartado "tajantemente" que se vaya a subir este impuesto en productos como el pollo, el arroz o el aceite.
  • Guindos ha señalado que "no se prevén cambios de ningún tipo en el ámbito del IVA".
  • Aunque ambos coinciden en que puede haber pequeñas modificaciones para cumplir direcciones comunitarias, que no alteran la estructura del impuesto.
  • La CE también aconseja que se rebajen las cotizaciones sociales para acelerar la creación de empleo y se compense con una subida del IVA, pero España no escucha.

España actúa como un hijo desobediente que hace oídos sordos a los consejos de su padre, pues se ha plantado y no contempla subir el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA). De esta manera no hace caso a las recomendaciones que en los últimos meses ha hecho la Comisión Europea (CE).

Este organismo comunitario propone al Gobierno español que aumente el IVA de algunos productos, es decir, que algunos pasen del tipo reducido del 10% al general del 21% para así incrementar la recaudación, pues Hispanidad ya informó de que nuestro país es el que menos recauda de la Unión Europea (UE) con este impuesto.

El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, que ha participado en unas jornadas financieras organizadas por Deloitte, ha descartado "tajantemente" que se vaya a subir el IVA de productos como el pollo, el arroz o el aceite, pero eso no impide que algunos productos sanitarios de primera necesidad tengan que cambiar de tipo para cumplir la directiva comunitaria. "La regla general es que no se va a subir el IVA, ni el tipo general ni se van a cambiar productos de tipo", ha añadido.

Así Ferre no deja lugar a dudas y no solo demuestra que no atienden el consejo de la CE, sino tampoco el del comité de expertos, presidido por Manuel Lagares, y que se reflejó en su propuesta para la reforma fiscal que presentaron hace unas semanas. En la misma recomendaron que muchos productos y actividades pasaran del tipo reducido (10%) al general (21%), excepto turismo, vivienda y transporte de pasajeros. Un consejo que los expertos no hicieron a la ligera, sino para aumentar la recaudación, pues en su opinión tributan pocas cosas al 21%, ya que más del 40% se quedan fuera de este tipo. En cambio, consideran que el superreducido (4%) es intocable.

Recuerden que la subida de los expertos afectaría a productos como el pollo y el resto de carnes, el pescado, el aceite, la pasta, las conservas, el azúcar, el chocolate, el agua, los refrescos y zumos, etc. y según señaló el periódico El Mundo supondría 342 euros más al año para cada familia.

Pero Miguel Ferre no ha sido el único que se ha manifestado al respecto del IVA de alimentos, también lo ha hecho el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, quien ha insistido en que "no se prevén cambios de ningún tipo en el ámbito del IVA" al margen de las "modificaciones pequeñas" para cumplir directivas comunitarias. Estos mínimos cambios no afectan a la estructura del impuesto, según el ministro.

"El mensaje del Gobierno es muy claro. Nosotros ya hicimos la modificación que teníamos que hacer del IVA, lo hicimos en julio del año 2012. Y el IVA en España está perfectamente ya ajustado a la media comunitaria", ha añadido Guindos.  

Aunque el tema del IVA no es el único en el que España hace caso omiso a la recomendación de la CE, pues esta le aconseja que rebaje las cotizaciones sociales para acelerar la creación de empleo y compense esto con una subida del IVA, pero nuestro país no quiere escuchar este consejo y así nos va.

Cristina Martín

cristina@hispanidad.com