Las autoridades españolas han solicitado a la Comisión Europea más tiempo para responder a Bruselas a su petición de explicaciones sobre los motivos por los que España no retiró las condiciones impuestas por la CNE a la OPA de E.ON sobre Endesa. Como se recordará, Bruselas exigió la modificación inmediata de las condiciones al entender que se trataba de condiciones ilegales.

Por su parte, el ministro de Industria, Joan Clos, anunció que cumpliría con las autoridades comunitarias en plazo, aunque los detalles de la posición española se remitirían el 11 de noviembre, una vez que hubieran respondido a los 5 recursos presentados ante el ministerio, cuyo plazo finaliza el día 10.

Sobre la mesa, dos reflexiones. La primera es el nivel de chapuza de la administración española, que responde siempre tarde, mal y nunca y a última hora. La segunda, el desplante del gobierno español a las instituciones comunitarias. No es la primera vez que el gobierno español anuncia que contestará a Bruselas una vez que haya cumplimentado los trámites internos. Menos mal que hemos regresado al corazón de Europa.