El empleo marcha bien, a pesar del revés de octubre, pero la temporalidad no mejora

Durante el periodo Zapatero, la creación de empleo ha marchado viento en popa. Lo que no ha mejorado es la precariedad de los contratos. En octubre ha subido el paro y eso puede suponer un cambio de tendencia, que no nubla el éxito en la firma de nuevos contratos a lo largo de la legislatura.

El único borrón es la precariedad: no es que el empleo temporal haya "descendido" hasta el 33%, es que permanece anclado en ese porcentaje desde que los socialistas regresaron a La Moncloa.

Lo sorprendente es que, siendo el país de la UE con más temporalidad, sea el sector público quien más acude a las empresas de trabajo temporal (ETT) verdadero cáncer del empleo estable. La temporalidad y los bajos salarios son las partes negras de la gestión socialista.

Mucho se habla de cambio de ciclo, lo que indica que si se quiere mantener el nivel de empleo será necesario reducir los impuestos laborales y las indemnizaciones por despido.