Sr. Director:

 

Soy de una las familias que piden clases de religión para mis hijos en los centros públicos. Lo hacemos porque todo nos da la razón. Sí. La Constitución así garantiza y obliga a los poderes públicos a que haya enseñanza religiosa para quienes lo pidan. Los políticos que niegan este derecho que yo ejerzo van contra la Constitución. Además España, por nuestra Constitución es aconfesional, no es laico. Rompan la pereza mental y léanse la Constitución, artículo 16.

 

Algunos me vienen con disparates sobre esta enseñanza religiosa. ¿Enseñar religión en la asignatura de historia? ¿Es que van a enseñar biología, zoología, matemáticas, lengua, inglés  física o dibujo con la asignatura de historia?

Conocer las religiones, la nuestra y las otras, el hecho religioso, es fundamental para entender nuestro tiempo y el pasado y el futuro. El que se conozcan hace que se sea más abierto, más defensor de los derechos humanos, de la verdad. Un ejemplo de ello es el Papa Juan Pablo II y muchos creyentes de diferentes religiones que, a veces se congregan, en Asís o en otros puntos del planeta para rezar, promover la paz, etc. Igualmente, el vivir la religión te implica en procesos personales de intentos de mejora personal, vivir valores, etc.

 

Es absurdo que la religión deje de ser asignatura evaluable para que a las herramientas del conocimiento que aporta se les haga justicia. Que a más conocimientos de la persona más amplios horizontes de libertad le corresponden.

 

Carlos M. López 

 

vegario@terra.es