Sr. Director:
Estupor, indignación y tristeza me han producido las declaraciones del señor Enrique Múgica, sobre que le importa tres cominos que le excomulguen o no, por ser partidario de la nueva ley del aborto.

 

Estupor porque una persona de su categoría no puede decir esa boutade, ya que sabe bien que  se puede excomulgar a quien no pertenece a la Iglesia, y él es judío. Indignación por lo que tiene de burla hacia los sentimientos  y convicciones de millones de católicos, conciudadanos suyos, por parte del Defensor de Pueblo.

Y tristeza porque quien tiene la obligación de defender los derechos de todos menosprecie de esta forma  los derechos de los más indefensos como son los no nacidos.

María Pardo Zamora