• Los italianos se consideran atrapados en España.
  • Y encima, Enersis, preparada para la venta, cae en el primer trimestre.
  • La eléctrica Endesa, llamada al desguace... previa reducción de plantilla.
  • Y ojo, porque los italianos quieren reducir más plantillas, vía bajas incentivadas.
  • Por de pronto, paralizadas todas las inversiones en generación.
  • En el primer trimestre, el resultado de explotación se redujo a la mitad.
  • Además, en Endesa también se esperan la nueva reforma del Gobierno.

Los resultados de Endesa durante el primer trimestre vienen precedidos por la bajada de un 7% en Enersis, la joya de la corona. Malos resultados: mal en el negocio regulado y en el libre.

Los italianos de ENEL, que son los que dirigen Endesa desde Roma, optaron por vaciar Endesa para llenar su actividad iberoamericana. Desvestir a un santo para vestir a otro. Sólo que el Santo re-vestido, la actividad en Hispanoamérica, también se ha caído, un 7%, en Hispanoamérica. En principio en Roma pensaron en vender Enersis para mantener su influencia en el sur de Europa. Ahora piensan en mantener Enersis con mayor capacidad de generación de recursos, pero vaciar, que no vender, Endesa, al menos a corto plazo. Y para ello han comenzado una reducción de plantilla que, una vez concluida, seguirá reduciendo la plantilla por goteo.

Endesa no se puede vender, pero sí desguazar. Las inversiones tienden a cero, también en generación. Y la situación ha llegado a un punto en el que ya no se trata de cesar a Borja Prado (en la imagen) o a Andrés Brentan (Ceo), tampoco de filializar Endesa (ya está filializada), de sacarla de bolsa, que es un procedimiento complejo. Pero lo cierto es que ENEL está desguazando Endesa porque Endesa ha dejado de interesarle, salvo como peón en el que jugar en la más que posible reconversión eléctrica europea.

Miriam Prat

miriam@hispanidad.com