Abro el periódico, y, ¿qué leo? Que se aprueba el matrimonio de homosexuales con el voto, entre otras personas, de Celia Villalobos, que yo sepa miembro del PP, partido al que yo voto.
Sigo leyendo, y en la sección de Madrid, leo otra noticia aún peor: Esperanza Aguirre da luz verde a la investigación con células madres embrionarias. Es decir, que si no teníamos suficiente con el aborto, con la píldora del día después, etc., ahora, esto. ¿Esa es la política de defensa de la vida del PP?
Pues bien, sepan ustedes, señores del Partido Popular, que mi confianza en ustedes empieza a desgastarse a un ritmo vertiginoso. Lo siento mucho, pero si esta es su política en materia de defensa de la vida y de la familia, dejen de contar con mi voto para futuras elecciones. Durante mucho tiempo les he defendido como la opción menos mala, incluso a veces la buena, ante familiares y amigos que se iban a otros partidos que defienden la familia. A partir de ahora, ya no les defenderé. ¿Qué argumentos podría esgrimir para ello? Ustedes mismos me han dejado sin ellos. En sus manos está devolverme la confianza..
Alejandro Rubio Sánchez
alejandrorubiosanchez@yahoo.es
