"Yo lo que pienso es que el Gobierno no está haciendo todo lo que se puede hacer". Así respondía el líder de la oposición, Mariano Rajoy, a nuestra pregunta sobre la postura popular en relación a las negociaciones. Sorprendentemente, tiene gracia, que diría el mismo Rajoy, el presidente del PP desconocía la "garantía realizada por Almunia para seguir manteniendo los fondos estructurales. El comisario europeo para Asuntos Económicos ha asegurado recientemente que España recibiría la misma cuantía hasta 2013, pero por la vía de la partida presupuestaria del I D.

El secretario popular de Política Económica y Social, Miguel Arias Cañete, desmiente la supuesta "garantía". En su opinión, es imposible que nuestra economía absorba los 40.000 millones de euros por la vía de los programas de I D. "Es verdad que esas partidas se han incrementado, pero también es verdad que el gran beneficiario será Alemania que tiene mucha más tradición industrial que nosotros y está en el eje del desarrollo de I D", señala Arias Cañete, quien añade que los fondos de I D se conceden por proyectos, mientras que los fondos estructurales son concedidos por países.

Cañete anuncia que hoy jueves 20 tendrá lugar una reunión en Galicia donde relanzarán la batalla por los fondos estructurales, que se desarrollará por las distintas Comunidades Autónomas, que son las que gestionan dichos fondos. Cañete no ha dejado de tener el dinero en la prioridad de su agenda política. Pero Rajoy, que hace dos meses dedicó la totalidad de su intervención a criticar al Gobierno por la falta de capacidad negociadora en materia de fondos estructurales, ahora desconoce la propuesta de Almunia. Entonces criticaba que España fuese a ser el "paganini" de la ampliación. Ahora se encuentra demasiado ocupado con el Plan Ibarretxe.
Es lo que tienen los nacionalistas: desvían recursos intelectuales hacia debates estériles, mientras que nos jugamos medio punto de riqueza nacional sin que a nadie parezca importarle demasiado.