El robo de secretos industriales, en este caso tecnológicos, es eje argumental de El poder del dinero, un thriller de argumento poco novedoso pero que reúne delante de la pantalla a tres actores veteranos de peso: Harrison Ford, Gary Oldman y Richard Dreyfuss.

Un prometedor y ambicioso joven, Adam Cassidy, obnubilado por sus ansias de riqueza  y poder, se verá envuelto en las rivalidades entre los dos magnates tecnológicos más poderosos del mundo cuando su jefe, Nicholas Wyatt, le obliga a espiar a su principal competidor. En ese complicado entramado, no sólo peligrará la vida de Adam sino la de sus allegados…

El director australiano Robert Luketic repite la fórmula que ya defendió en su película 21 Blackjack, es decir, un joven muy inteligente que consigue el éxito de forma rápida e ilegal  mientras deja en el camino a amigos y olvida lo que realmente es importante.

Aunque muy ligera en sus propuestas, El poder del dinero lanza algunos mensajes interesantes sobre la complejidad del mercado laboral actual y la injusta situación de muchos jóvenes sobradamente preparados, a la vez que nos habla del error de sobreestimar el poder del dinero.

Basado en una novela de Joseph Finder, El poder del dinero es un thriller entretenido pero totalmente olvidable.

Para: Los que les gusten los thrillers, independientemente de su calidad