El Papa sólo le pide una cosa a Gran Bretaña: que respete la vida desde la concepción hasta la muerte natural

Reino Unido, arquetipo anglosajón en Europa, fue el país que inauguró en el mundo la repugnante era de la eugenesia, durante los años 20 y 30 del pasado siglo. Las aportaciones británicas a la historia han sido muy importantes, pero ahora mismo se ha convertido en uno de los países del mundo con menos respeto a la vida humana especialmente a la vida humana más débil, la del concebido y no nacido.

Benedicto XVI no ha podido ser más claro en el dispuso que pronunció con motivo de la presentación de cartas credenciales del nuevo embajador británico ante la Santa Sede, el norirlandés Francis Martin-Xavier Campbell, católic a los ingleses les ha hablado de respeto a la vida humana desde la concepción a la muerte natural, del respeto debido a los embriones y a la familia. Reino Unido admite el matrimonio homosexual, quema embriones sobrantes de la fecundación asistida permite todo tipo de manipulaciones con seres humanos no desarrollados

No sólo es Benedicto XVI ha aclarado ante el nuevo embajador, en un mensaje dirigido al pueblo inglés ya sus instituciones, que la libertad y la tolerancia debe estar enraizadas en la verdad o no tendrán sentido alguno.

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