La vida es bella. Este miércoles 1 de diciembre, pero el martes 30 de noviembre era horrible

El martes la Bolsa cerró un mes con una caída del 11%, más del 20% desde que comenzará el año. El martes, el diferencial con el bono alemán batía marcas históricas pero el miércoles habíamos llegado a la Arcadia: el señor Trichet daba a entender que en su reunión del jueves 2 de diciembre el BCE anunciaría que mantiene abierta la manguera del crédito. El mundo es hermoso.

Para entendernos, que el BCE siga produciendo dinero barato es bueno para un bono español atacado por los inversores y especuladores, sabedores de que, si la deuda española se hunde, Europa acudirá en su auxilio, en consonancia con los rescates realizados en Grecia e Irlanda. Ahora bien, lo que ha producido esta crisis ha sido la burbuja especulativa de los bancos centrales, más la Reserva Federal que el BCE o el Banco de Japón, pero todos han colaborado en el desaguisado. Seguir proporcionando liquidez al sistema es como echarle gasolina al fuego.

Además, está la coña de los rescates. Que no se rescata a la economía irlandesa, sino sólo al bono irlandés, cuyos compradores son irlandeses... y alemanes, franceses, británicos o norteamericanos. Es a los especuladores a los que ayuda un rescate, no al país. Y encima, se les ayuda a costa de la pérdida de soberanía de los irlandeses y del ajuste draconiano de sus ciudadanos(y ciudadanas, en lenguaje políticamente correctos). La única solución, habrá que repetirlo, es dejar quebrar a los bancos quebrados y dejar quebrar a las deudas soberanas quebradas. Ayer reproducíamos el artículo del profesor Javier Díaz sobre el caso islandés: quebraron sus bancos, nadie les rescató y ahí continúan. Cualquier rescate resulta traumático, pero mucho más traumáticas son sus consecuencias: en cuanto se anunció el rescate irlandés los intermediarios financieros empezaron a especular contra la deuda portuguesa y contra la española.

En cualquier caso, que la Bolsa caiga y el diferencial se desmande (noticias del martes 30) es una mala noticia, pero la peor nueva de esa misma jornada fueron las cifras de paro en España, que duplican las de Eurolandia y del conjunto de la Unión Europea de los 27. Ése es el drama, no lo que la Bolsa baje o el diferencial suba.

Eulogio López
eulogio@hispanidad.com