Sr. Director: 
Finalizamos el año dedicado a Darwin, del que muchos desconocen su lado oscuro.

 

Afirmaciones suyas lamentando que los miembros débiles de las sociedades civilizadas se propaguen y que los inadaptados, los degradados y los miembros viciosos tiendan a reproducirse a un ritmo superior al de los providentes y generalmente virtuosos, lo convierten en el moderno forjador de la eugenesia.

Su teoría evolucionista implantada en las escuelas, pretende redefinir al hombre, pues si éste es un mono evolucionado, no poseerá alma inmortal. Así se niega el pecado, la encarnación y la redención y hace inútil la Iglesia de Cristo. Adán y Eva serían un mito, y Dios no fue el Creador del hombre ni del universo.

Soren Lovtrup, embriólogo sueco afirma: Algún día el mito darwinista será considerado como el mayor engaño en la historia de la ciencia. Además, la Paleontología no presenta ni una sola prueba a favor del mismo pues, tras estudiar millones de fósiles se concluye que no existen fósiles intermedios que prueben el paso de una especie a otra.

El polaco Maciej Giertyh afirma: Yo trato de demostrar que los evolucionistas tienen su propia religión y distorsionan los hechos para apoyarla, al tiempo que ignoran las pruebas que no encajan. Esta religión es el ateísmo.

Ana Coronado