Sr. Director:
Aunque el pasado mes de noviembre de 2003 el Gobierno creó el Observatorio de la Familia, con la finalidad de conocer la situación de las familias y de su calidad de vida, realizar el seguimiento de las políticas sociales que le afectan, hacer recomendaciones en relación con las políticas públicas y efectuar estudios y publicaciones que contribuyan al mejor conocimiento de las necesidades de la familia, todavía no se ha puesto en marcha ni se ha anunciado su próximo desarrollo.
Este retraso y abandono por parte del Gobierno es injustificable. No sólo por el tiempo que lleva sin ponerse en marcha sino, y es lo más importante, por ser una medida tan importante y necesaria para la familia española y reclamada insistentemente por las asociaciones familiares. Además, al contar con la participación en dicho Observatorio de expertos y asociaciones familiares- reconociendo un papel significativo, históricamente ignorado, a las asociaciones familiares, y que, de este modo, podrán asumir su papel de agentes sociales-, así como permitiría a la Administración conocer, de primera mano, las recomendaciones y propuestas de la familia española. Es por ello que desde el IPF reclamamos la puesta en marcha de dicho Observatorio de la Familia. Lo contrario sería que el Gobierno no quiere que las familias no participen en su futuro y ni quiere contar con la participación y el diálogo de las asociaciones familiares
Pero, para que este Observatorio sea verdaderamente de familia y eficaz, se concluye desde IPF deben, por una parte, desarrollar sus actividades con perspectiva de familia y, por tanto, dirigirse a la familia, y por otra parte, debe acompañarse de dotación presupuestaria suficiente, que mida el verdadero interés y sensibilidad política por la familia, así como la creación -compromiso electoral incumplido por el Gobierno socialista- de una Secretaría de Estado de Políticas Familiares.
Eduardo Hertfelder
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