Sr. Director:
Suiza acaba de anunciar un concurso para buscar un nuevo himno nacional que sustituya al actual. La razón, sobre todo, que el vigente tiene demasiadas referencias a Dios en su letra; y en segundo lugar que tiene ya mucha antigüedad.

"El verdadero problema es, sobre todo, el texto", según explica Lukas Niederberger, que forma parte de la Sociedad Suiza de Servicios Públicos (SGG), la entidad a la que se ha encargado que busque el nuevo himno. El actual himno "es un salmo, una oración, pero tenemos que abrirnos a la sociedad religiosamente neutral. Tenemos (en Suiza) ateos, no solo creyentes en Dios, por lo que este himno es actualmente una dificultad".

 

El "salmo suizo", como se conoce al himno actual, fue compuesto en 1841 y está lleno de menciones e invocaciones a Dios, muy en la línea de las raíces históricas protestantes (principalmente calvinista) del país.

 

La traducción de parte de su texto dice: "Cuando el cielo al amanecer se pone rojo, / y en nosotros su brillo derrama / Tú, oh Señor, apareces en su luz. / Cuando los Alpes resplandecen brillantes, / ora a Dios, para entregarte a Él / de manera que sientas y entiendas / que Él habita en esta tierra. Sin duda esto molesta a los laicistas.


Pedro García