El 19 de mayo le vencen 8.500 millones de euros

 

El Gobierno reclama de la UE agilidad para salvar a Grecia y demostrar así que es un actor global fuerte y cohesionado. Así lo señalaba el vicepresidente territorial, Manuel Chaves, quien también recordaba que el 19 de mayo le vencen 8.500 millones de euros. Por su parte, el secretario de Estado de Economía, Carlos Ocaña, se sumaba a la petición de agilidad y reclamaba que la UE haga lo que ha dicho que va a hacer. O sea, que se concrete la solidaridad de carne y hueso.

En todo caso, Chaves comparte la tesis de los analistas que señalan que hasta que no pasen las elecciones alemanas del próximo 9 de mayo no habrá plan de ayuda alemán. Y Merkel despeja el camino asegurando que habrá ayuda; no es discutible. Sólo se discute la fecha.

Ocaña asegura que observa el caso griego con atención, pero no con preocupación. Para conjurar el riesgo de contagio, España debe hacer lo que ha dicho que va a hacer. ¿Algo más? No. Sólo concretar el plan de austeridad, definir en qué partidas se va a recortar y así dar confianza y tranquilidad a los observadores y analistas internacionales de que nuestro país es un país serio que hace los deberes, apunta Ocaña. Y eso pasa por definir este mes de mayo no sólo el plan de austeridad sino también el techo de gasto. No hay novedad en concretar los planes, pero sí hay que dotarles de contenido. O sea que hasta ahora han sido palabras huecas.

Por último, Ocaña se muestra poco preocupado por la subida del diferencial respecto al bono alemán producida en los últimos días. Es coyuntural y por tanto desaparecerá; el diferencial que me preocupa es el subyacente que nos coloca en una calificación crediticia peor; es un recordatorio de nuestra imperiosa necesidad de reducir el déficit.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com