Según De la Vega, la extradición de siete etarras procedentes de México a España no afecta para nada al proceso de paz. Al contrario, demuestra que la colaboración judicial funciona. La realidad es otra. Según informa la AVT a Hispanidad, la extradición de etarras fue frenada por el propio Gobierno Zapatero hace un año.

Lo que ocurre es que en el proceso de rendición en el que se encuentra el Gobierno, los etarras saben que su futuro es mucho más halagüeño en España que fuera. Así que muchos han llegado incluso a pedir la repatriación. Es el caso. Lo que De la Vega trata de vender como un éxito de la colaboración no es más que una evidencia de la rendición.