En concreto, 50 millones de euros, según denuncia la Fundación Vida

El director de la Fundación Vida,  Manuel Cruz, ha denunciado que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero está dedicando al aborto los 50 millones de euros que recorta a la Investigación en España, es decir, nos está condenando a décadas de crisis y paro.

El directivo lamentó que el presidente se deje llevar por su sectarismo y demagogia hacia los sectores minoritarios radicales y apueste por hundir totalmente a España, al hurtar los recursos nacionales al sector más necesario para que este país pueda salir reforzado de la crisis y se posicione en el mundo que quedará tras ésta.

Desde el punto de vista económico y de la responsabilidad de Estado, esta medida no tiene ningún sentido. Se potencia la destrucción de futura mano de obra, directivos y consumidores mientras que se cercena el desarrollo de nuevas tecnologías y la búsqueda de nuevos modelos que permitan la reconversión de la economía nacional, analiza  Manuel Cruz.

Para salir de la crisis, en especial la española, hace falta iniciativa, inventiva, creatividad y, sobre todo, tener garantizado el reemplazo generacional de los trabajadores y consumidores actuales. El Gobierno se había empleado a fondo contra la segunda, con el aborto libre y la eliminación de ayudas a la maternidad, pero ahora ha decidido acabar con todo a lo grande, lamentó del directivo.

Además, el empecinamiento del Partido Socialista con cargar a las arcas públicas con el aborto nos acerca más al copago sanitario, como quedó claro en la última reunión interterritoral de Sanidad, puesto que las Autonomías, asfixiadas económicamente, no pueden afrontar este nuevo y desorbitado gasto, que aumentará de cuantía al dar más facilidades para abortar y dificulta aún más ser madre.

Frente a estas medidas depresivas, decepcionantes y suicidas, Fundación Vida propone una mayor inversión en gastos que fomenten la natalidad y garanticen el futuro del país, empezando por la abolición del aborto libre, a la vez que los recortes deberían producirse en gastos desorbitados e improductivos, y no en sectores sobre los que versa el Estado del Bienestar.

Por último,  Manuel Cruz recordó al Ejecutivo que estas irresponsabilidades serán juzgadas, y los responsables pagarán los actos que están cometiendo en la actualidad, muchos de los cuales serán irreversibles, como la generación de españoles que se perderá como consecuencia de la nueva Ley del aborto.