El visto bueno oficial aún no se ha producido, pero en el supervisor consideran que han cumplido todas las condiciones impuestas. Las seis cajas de ahorros de la región tienen previsto poner en marcha la nueva entidad a la mayor brevedad posible. Braulio Medel y Unicaja llevarán la voz cantante en un banco que quiere ser el brazo armado inversor de Chaves. De esta forma, la Junta de Andalucía consigue controlar las inversiones de las cajas de forma indirecta. El asunto podría crear precedente. En principio, los promotores cuentan con la ficha del Banco Europeo de Finanzas, pero podrían cambiar la denominación por la de Banco Andaluz, Banco de Fomento o Banco Andaluz de Inversión.

Oficialmente, que conste, el banco de España, aún no ha respondido, pero la respuesta ya se sabe que será afirmativa. Dos años lleva luchando el presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE, Manuel Chaves, por conseguir un brazo armado financiero que le permite disponer, más o menos a su antojo, del ahorro andaluz.

Primero intentó disponer de un gran banco con la fusión de las seis cajas de ahorros andaluzas. No pudo ser, porque los propios cajeros socialistas se negaban a perder cuota de poder, y en todo matrimonio financiero hay alguien que gana y alguien que pierde.

Además, estaba el caso de Cajasur, creación de la Iglesia, que no estaba por la labor de dejarse mandar por la Junta y a la que los socialistas sometieron al mayor acoso a la que se ha visto sometido una caja de ahorros por un podr poltiico en toa la etapa democrática.

Finalmente, de la mano de Braulio Medel, ex presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros, exviceconsejero de Economía de la Junta y hoy presidente de Unicaja, llegó al día de crear un banco propiedad de las cajas de ahorros, justo en el momento en que el gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, clamaba contra la politización de las cajas y contra el hecho de que las cajas tuvieran bancos y los bancos no pudieran tener cajas.

Pero el que la sigue la consigue. En un principio, el banco de España dio largas al proyecto. Luego exigió unas condiciones muy claras en cuanto a independencia del poder político, presencia de las cajas socio en la gestión, instrumentalización de las inversiones, procedimientos de control, etc. Pero, al final, Medel ha conseguido cumplir, o decir que va a cumplir, todo lo exigido. Hace 3 semanas entraba en el Caserón de Cibeles el último informe remitido por las cajas de ahorros, en la que se juramentaban sobre todas las condiciones impuestas por Caruana. Al final, el Banco de España se ha visto obligado a dar el visto bueno. No lo ha dado, pero lo dará en las próximas semanas.

El entusiasmo se ha desbordado en Andalucía, donde se afirma que la nueva entidad será una realidad en un plazo brevísimo de tiempo, desde luego, en el trascurso del presente año. El nombre de Banco Europeo de Finanzas (sello propiedad de Unicaja) posiblemente sea provisional. Banco Andaluz, Banco Andaluz de Inversiones, Banco de Fomento, pueden ser otras tantas denominaciones, pero eso tampoco es preocupante. Lo preocupante es en qué va a invertir la entidad, que resucita la vieja banca industrial española.

Al mismo tiempo, el peligro es que otras comunidades autónomas pretendan hacer lo mismo, que no deja de ser desvirtuar el carácter mutual de las cajas de ahorros y un paso hacia su conversión en sociedades anónimas. Además, no deja de ser una forma de que el poder político pueda disponer sin trabas de un control mayor sobre la inversión futura de la entidad.