El director de Comercio Interior se mantuvo calladito cuando la fusión de Ruhrgas. En la mañana del jueves, se convalidó el decreto del 24 de febrero, que permite ala CNE vetar la OPA de EON. La Caixa confía en la decisión del Gobierno de parar a los alemanes, aunque duda de la influencia de Zapatero en Bruselas. Endesa insisten: pagará el aval de 1.000 millones de euros, a pesar de las responsabilidades legales y financieras que pudiera acarrearles en el futuro

El director general de Comercio Interior, el alemán Alexander Schaub, se ha convertido en el gran defensor de la OPA de E.ON sobre Endesa y de las inalienables prerrogativas de la Comisión Europea como árbitro de las operaciones empresariales en la UE. Pero no siempre emplea la misma vara de medir. Así, cuando en 2002 se produce la fusión entre E.ON y Ruhrgas, incluso contra el acuerdo de las autoridades antimonopolio germanas, el señor Schaub no abre la boca, y eso que estaba integrado en la Comisaría de la Competencia, precisamente como director general de Competencia, que presidía por aquel entonces el inefable Mario Monti. Recordemos las fechas: el 5 de julio de 2002 el Ministerio de Economía alemán aprobó la toma de control. El 1 de febrero del siguiente año Ruhrgas consolidó ya contablemente con E.ON. Ni que decir tiene que la actual E.ON es más gasera que eléctrica.

Pues bien, silencio total por parte del funcionario Schaub. Silencio total, a pesar de que se trataba de una concentración entre una eléctrica -a su vez fusionadas a golpe de recomendación oficial- y una gasista, con vistas a crear un gigante alemán capaz de convertirse en una de las tres grandes compañías europeas en el sector más estratégico de todos, así como en la gran comprador del gas ruso. Y Schaub, calladito.

Ahora, por el contrario, Schaub lanza bravuconadas como la de que Zapatero será expedientado por obstaculizar la OPA de E.ON sobre Endesa, o se dispone a abrir expediente a España por el decreto del 24 de febrero, tras dar ¡10 días! al Gobierno español para responder a una serie de preguntas que son afirmaciones.

Lo que está claro es que la Unión Europea no es un club de socios en régimen de igualdad. Alemania manda y cuida de sus intereses nacionales. Por ejemplo, Bruselas en general y Schaub en particular han pasado del proscenio a las bambalinas cuando se ha tratado del caso francés, en el que el gobierno galo decidió ordenar la fusión de Gas de Francia con el grupo Suez, simplemente para evitar que la italiana ENEL se comiera a la segunda. Eso sí, París influye más en Bruselas porque no necesitó defenderse de la andanada lanzada pro el Gobierno italianos: Alemania sí, Alemania, actual campeona del liberalismo empresarial en la UE- Reino Unido, Holanda y Dinamarca, todo ellos países muy liberales, vetaron la propuesta de Roma de crear un frente contra el proteccionismo energético.

Pero el gobierno Zapatero no cede. En la mañana del jueves se convalidaba el decreto que permite a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) vetar la OPA de E.ON, con lo cual quedaría expedito el camino a una OPA de Gas Natural convenientemente mejorada. De otra forma, el accionista de Endesa no acudirá a ninguna.

En La Caixa ha renacido la esperanza de triunfo, Por eso, Ricardo Fornesa ha declarado que apoya a Gas Natural. Sólo ha yuan duda, como afirman un alto cargo de la propia entidad a Hispanidad.com, confiamos en la decisión del Gobierno. En lo que no confiamos es en su pericia para salir indemnes del ataque europeo. Vamos que confía en la voluntad del Ejecutivo Zapatero pero no en su capacidad técnica y sobre todo, en su influencia europea para cerrarle el paso a E.ON.

Respecto a la decisión de la jueza de Madrid, Miriam Iglesias, que aceptó el recurso de Endesa y paralizó la OPA de Gas natural, aunque impuso a la eléctrica una fianza de 1.000 millones de euros, lo cierto es que en la eléctrica aseguran que seguirán adelante (la decisión se tomará en el consejo de administración del próximo martes 28). El peligro consiste en que puede provocar responsabilidades jurídicas y financieras, en el caso de que algún accionista se sienta perjudicado por habérsele negado la posibilidad de acudir a una oferta (no parece que a la OPA actualmente en vigor de 21,3 euros por acción, con dos tercios pagadero en acciones de GN). En cualquier caso, es un riesgo.

Respecto a esta cuestión, los dos periódicos económicos más famosos del mundo, el Wall Street Journal y el Financial Times, parecen coincidir en la misma tesis, en sendos artículos publicados el miércoles 22.