Sr. Director:

Acabo de leer en la prensa la reciente estadística de los abortos legales producidos en España ,que este año alcanzan la cifra de 84.985 y que representan un 6,50% de aumento sobre el año anterior, -lo que demuestra el fracaso de la política gubernamental del preservativo, sí, eso del pónselo, póntelo-. Pero como católico y valenciano, lo que más pena me da y entristece, es ver que la Comunidad Valenciana,  es una de las tres en las que más abortos se practican, -cerca de nueve mil-, y lo más gordo todavía, que de esos abortos, el 35% se llevan a cabo y son financiados por el Servicio de Salud de la Comunidad, es decir, con el dinero que los valencianos aportamos con nuestros impuestos. ¿No es por tanto, una incongruencia y perversidad, que un católico tenga que contribuir con su dinero a ese abominable crimen del aborto?. Creo que no tendremos más remedio que acogernos a la objeción de conciencia fiscal, por lo meno s en la parte alícuota que corresponda a ese dispendio gratuito, ya que contra leyes tan inicuas como esa, nada podemos hacer por ahora. Pues a estudiar el asunto.

Vicente Febrer Forés

vfebrer@hotmail.com