El Foro de Ermua ya calienta motores para la concentración del sábado 18 en Bilbao. Una semana antes de la manifestación de la AVT, el foro leerá un manifiesto por la unidad de España en Bilbao, a pesar de la petición del alcalde de la ciudad, Iñaki Azkuna, quien, preocupado sobre todo por los perjuicios que la concentración ocasionará al tráfico, pidió a los convocantes que trasladaran el lugar de reunión. Reproducimos bajo estas líneas el llamamiento del Foro de Ermua.

Tras el vibrante acto celebrado en Barcelona el pasado sábado 4 de febrero, el Foro Ermua convoca a todos los ciudadanos a una concentración para la presentación del Manifiesto Por la unidad de España, por la igualdad y la solidaridad de todos, el sábado 18 de febrero de 2006 en la Plaza Moyúa de Bilbao.

Este acto estará protagonizado por el movimiento cívico y por destacadas personalidades de la sociedad civil, como expresión pública en la actual situación de profunda crisis política y como manifestación de rechazo a la política de negociación con ETA. Tras la presentación, a cargo de Mamen Gurruchaga, Iñaki Ezkerra (portavoz del Foro Ermua) leerá el Manifiesto, intervendrán Francisco Caja (presidente de Convivencia Cívica Catalana), Antonio Aguirre (PSE), Nerea Alzola (concejal del PP) y Gustavo Bueno (catedrático de Filosofía). Mikel Buesa (presidente del Foro Ermua) cerrará el acto.

Centenares de profesores universitarios y profesionales de toda España han suscrito ya el Manifiesto Por la unidad de España, por la igualdad y la solidaridad de todos, al que se puede acceder en www.foroermua.com. Una representación ocupará el estrado el día 18 de febrero en Bilbao.

El Manifiesto denuncia la ofensiva nacionalista de los últimos años que, teniendo siempre como punta de lanza a la organización terrorista ETA, ha tomado la forma del Pacto de Estella-Lizarra en 1998, el Pacto de Perpignan en diciembre de 2003, el Plan Ibarretxe y, en estos momentos, el proyecto de nuevo Estatuto para Cataluña. El Manifiesto se pronuncia por preservar el Pacto constitucional de la Transición, como mejor garantía de la igualdad de todos los ciudadanos y de la solidaridad entre las Comunidades Autónomas. En caso de abrirse expresamente un proceso de reforma de la Constitución, debería servir para zanjar definitivamente la distribución de competencias entre el Estado y las Comunidades Autónomas. Finalmente, el Manifiesto solicita la reforma del sistema electoral español para reducir la excesiva influencia de las fuerzas nacionalistas sobre los asuntos generales de España.