• El FMI recomienda medidas para limitar el poder de los llamados fondos buitre, de modo que la fórmula que el juez Griesa aplicó contra la Argentina "no se repita" con otros países en el futuro.
  • Para el FMI, el bloqueo de los fondos buitre puede desanimar a los acreedores pactistas a aceptar la reestructuración de deuda, ya que temen quedar en peor situación y acabar cobrando menos que los rebeldes.
  • El fallo del juez Griesa podría complicar los procesos de reestructuración de deuda, añade el organismo que preside Christine Lagarde. 
Argentina libra una batalla contra los fondos buitre, que en julio de este año obtuvieron una sentencia judicial favorable en EEUU para cobrar miles de millones de dólares por la quiebra del país en el 2002. Ese fallo judicial llevó a Argentina a una nueva suspensión de pagos el pasado 30 de julio.

La sentencia judicial -del juez Thomas Griesa- obligaba al país hispanoamericano a pagar 1.330 millones de dólares más intereses a los bonistas que rechazaron dos reestructuraciones de deuda (de 2005 y 2010) y que demandan ahora el pago completo de los títulos que el país dejó de pagar hace 12 años. Son los denominados 'fondos buitre', que así tratan de extorsionar a Argentina. 

Griesa dictaminó que Argentina no puede realizar pagos a sus bonistas reestructurados si no compensa al mismo tiempo a los 'fondos buitre'.

Pus bien: el FMI, organismo que preside Christine Lagarde (en la imagen), emitió ayer un documento crítico hacia los efectos nocivos que las decisiones del juez Thomas Griesa pueden tener en los procesos de deuda. "Hay que limitar la incertidumbre" derivada de litigios de esa naturaleza, advierte, según informa La Nación.

Para el FMI, "el bloqueo de los fondos buitre puede desanimar a los acreedores pactistas a aceptar la reestructuración, ya que temen quedar en peor situación y acabar cobrando menos que los rebeldes", explica La Nación.

El organismo que preside Christine Lagarde añade que el fallo (del juez Griesa) que obliga a la Argentina a hacer pagos prorrateados e impedir que cobren quienes renegociaron su deuda hasta que cobren los 'fondos buitre' podría complicar los procesos de reestructuración de deuda. La resolución del juez Griesa "puede exacerbar los problemas de acción colectiva", advierte, en una explícita referencia a las demandas judiciales que abren los llamados fondos buitre.

Por eso, el texto recomienda medidas para limitar el poder de los llamados fondos buitre, de modo que la fórmula que el juez aplicó contra la Argentina "no se repita" con otros países en el futuro.

El FMI propone modificaciones de contrato que permitan corregir "las carencias que hoy tiene el sistema" y que fueron evidentes en el caso argentino, por el que se muestra "muy preocupado".

El documento reseña que "acontecimientos recientes, incluyendo el litigio argentino, han puesto de manifiesto las vulnerabilidades del marco jurídico actual", que "no es lo suficientemente robusto" como para resistir el embate de fondos como el de Paul Singer, capaces de poner en riesgo todo un proceso de renegociación de deuda. De Paul Singer hemos hablado en Hispanidad como uno de los especuladores que extorsiona a la Argentina.

El enfoque que hace el FMI del problema dista, sin embargo, del que promovió el gobierno de Cristina Kirchner con su apelación a las Naciones Unidas (ONU) para procurar allí la redacción de un nuevo marco legal para la renegociación de deuda soberana.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com