El nacimiento de Dª Leonor presiona a Zapatero para eliminar la prevalencia del varón en la sucesión a la Corona de la Carta Magna. Las feministas exigen que el cambio se produzca cuanto antes, aunque los juristas señalan que el cambio no es urgente. El Príncipe Felipe aboga por el cambio para adaptarse a la lógica de los tiempos, aunque cede la decisión a las Cortes. Los Príncipes de Asturias no bautizarán a Dª Leonor hasta pasadas las navidades.

El nacimiento de Dª Leonor añade elementos nuevos al debate político. Jurídicamente, el cambio constitucional en la sucesión a la jefatura del Estado no sería necesario hasta que los Príncipes de Asturias tuvieran un hijo varón. Por otra parte, desde el punto de vista jurídico resulta complicado establecer una reforma que no sea retroactiva, es decir, que no se aplique a las actuales infantas. Conviene recordar que la sentencia del Tribunal Constitucional relativa a la no marginación de la mujer en la sucesión a los títulos nobiliarios permite dar marcha atrás a las actuales discriminaciones.

Pero el debate jurídico no es el relevante. El importante es el social. Y el mismo Príncipe Felipe ha defendido el cambio constitucional para adecuarse a lo que ha calificado como la lógica de los tiempos. Eso sí, recuerda que corresponde a las Cortes y al Gobierno arbitrar el cómo y el cuándo. Y en el cuándo, el movimiento feminista ya ha instado al Gobierno a realizar la reforma cuanto antes, para evitar que la situación de discriminación pueda perjudicar a Dª Leonor.

Además, las feministas recuerdan que España tiene vetado el convenio para la eliminación de toda forma de discriminación en el punto relativo a la discriminación del acceso de la mujer a la Corona. Y Zapatero, no lo olvidemos, es feminista, además de rojo. Total, que la presión social existe.

Pero ocurre que el PSOE se encuentra en su peor momento de intención electoral desde que el Estatut catalán llegara a las Cortes. Así que el nacimiento de Dª Leonor no ha podido llegar en peor momento. Además, el PP ha emprendido una dura campaña antiestatutario aprovechando el desgaste electoral que el socialismo está asumiendo con la reforma estatutaria. El rechazo del Gobierno a la oferta de Rajoy para la negociación a dos bandas, redoblará seguramente las posturas más rígidas: campaña publicitaria, recurso de inconstitucionalidad, etc.

Con este panorama, ZP tendrá que resolver cómo enfocar el asunto. Si consigue calmar las exigencias sociales para un cambio constitucional inmediato, podría contar con Dª Leonor como argumento para disolver Cortes antes de que en 2007 Bruselas corte el grifo de la financiación y nuestra economía comience a sufrir los efectos. En caso de que se vea atrapado por su feminismo, se tendrá que fajar de paso con los nacionalistas que probablemente aprovechen la reforma constitucional para avanzar hacia la España plurinacional: el estado federal. Difícil envite

Y a todo esto, a los Príncipes de Asturias no se les ocurre otra cosa que anunciar que bautizarán a Dª Leonor pasadas las navidades. ¿Por qué privar a su primogénita del bautismo desde el primer momento? Conviene recordar que el obispo de Madrid, Mons. Rouco, ha recomendado bautizar cuanto antes. ¿Por qué su Alteza católica decide pasar por alto las recomendaciones de su pastor?