En TVE, el embajador de España en Irak, Ignacio Rupérez, afirmaba que "estamos en un proceso de rectificación de errores que se manifiesta en el aumento de tropas, en el deseo de volver atrás en la nefasta decisión de suprimir el ejército iraquí, en la reapertura de las fábricas estatales". Y añadía: "La salida de las tropas provocaría un problema para este país y para toda la zona, dado el vacío de poder, que paradójicamente hoy lo llenan las fuerzas extranjeras. Las únicas capaces de dar seguridad y de intermediar entre los distintos sectores irakíes enfrentados, esa es la paradoja. Sería un problema para toda la zona y para los iraquíes en especial".