Sin duda forman parte de las prioridades del gobierno y de la buena relación que este mantiene con la Generalitat de Cataluña. Por eso, ambas administraciones han firmado un convenio para la ejecución del proyecto Actuaciones para la conservación del urogallo pirenaico y del águila perdicera por el irrisorio precio de 381.000 euros. De estos, 260.000 euros serán aportados por el ministerio de Medio Ambiente y el resto (121.000 euros) por el Departamento de Medio Ambiente y Vivienda de la Generalitat.

Eso sí, en el 2006 el ministerio sólo pondrá 15.000 euros y el grueso queda para el año siguiente. Así, como para irse probando el buen rollo. Y sobre todo, para ver qué pasa a partir del 1 de noviembre, porque como dice Durán, lógicamente el gobierno no va a tomar decisiones trascendentales hasta saber quién será su interlocutor a partir del próximo otoño. Y sin duda el urogallo pirenaico forma parte de estas prioridades, puesto que se trata de especies es un serio proceso de regresión.

Y para que se vea que los catalanes son solidarios o expansionistas, según se vea- Los Planes de Conservación de estas dos especies afectan también a las comunidades de Navarra y Aragón, aunque el 85% del censo se encuentra en Cataluña.