Las dificultades que está poniendo el delegado del Gobierno en Madrid, Constantino Méndez para que la marcha se desarrolle con normalidad. Dificultades en cuanto al trayecto, a la formación de las cabeceras.
Llama la atención la predisposición de la Delegación del Gobierno a aparcar los más de 300 autobuses que ya han confirmado que vienen a Madrid muy lejos del lugar de la manifestación, quizá es que Méndez quiere vengarse (conviene recordar que las detenciones ilegales perpetradas a raíz de la última marcha de la AVT pueden costarle el puesto al delegado del Gobierno).
Méndez ha decidido declarar la movilización de alto riesgo. También se ha sabido que Méndez ha puesto en marcha un dispositivo para la entrada de los autobuses a Madrid, al estilo del Muro de Berlín: habrá chequeo y cacheo en la entrada de estos autobuses a Madrid. Además yo, personalmente, he recibido las caricias de sus actitudes dictatoriales con sus gorilas; fuimos tratados como maleantes. Debería poner más interés en los problemas que tiene con las pandillas, delincuencia y falta de seguridad de ciudadano, y no este seguimiento a las victimas.
Juan Luis Urbano Mesa
urbanomesa@yahoo.es
