El Consejo de la Juventud de la Comunidad de Madrid celebró el pasado miércoles una reunión extraordinaria. Se trataba de aclarar los malos entendidos ocurridos en la Asamblea del pasado 16 de abril. Sin embargo, no hubo nada de eso. La presidenta Esther Castellanos, remitió todas las respuestas al email. Desde las irregularidades contables, a las facturas poco justificadas.

Según Castellanos lo que había ocurrido era un problema de la gestoría del que se informaría por correo electrónico. Al problema de la gestoría había que añadir las reformas emprendidas en los dos pisos del CJCM, que han hecho bailar las facturas.

Por cierto, las reformas afectan a los dos pisos que el CJCM dispone para sus actividades. Aunque, en realidad, sólo disfruta de uno, porque el otro ha sido okupado con todas las bendiciones de la junta directiva del CJCM por la Asociación Amigos de la Tierra que se dedica a realizar propaganda verde.

Los Amigos de la Tierra se instalaron en uno de los pisos que la Comunidad de Madrid tiene destinados para el CJCM hace años mediante un acuerdo de cesión temporal. Sin embargo, todos los años se renueva la cesión sin que otras asociaciones puedan disfrutar de semejante chollo. Por supuesto, los Amigos de la Tierra no pagan ni un euro al CJCM ni a la misma Comunidad de Madrid. Otra irregularidad que tampoco parece preocupar a nadie.