El Consejo de Estado señaló que la Ley de Matrimonio Homosexual promovida por el Gobierno tenía puntos que chocaban con la Constitución. Su informe era todavía más valioso porque estaba redactado por uno de los consejeros considerados progres dentro de la institución. Pero dio igual. Pasaron rodillo. Porque para la izquierda, el derecho es algo subjetivo, voluble, sujeto a la voluntad política. Los progres nunca han entendido muy bien eso del imperio de la ley. Por eso Zapatero se permite fumar en Moncloa alegando que es su casa. Se equivoca, es nuestra casa, patrimonio de todos los españoles.

Pues bien, lo mismo ocurre con el informe del Consejo de Estado. El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, afirma que se tendrá en cuenta como otros muchos informes. Y la vicepresidenta De la Vega, sugiere que se trata de una reflexión de tipo académico. Además, la ministra portavoz, retuerce el contenido del informe en un sentido que le interesa, desprestigiando a los populares que han hecho casus belli del dictamen consultivo. Francotiradores de la política, llegó a decir la vice. ¿La próxima? Ultraderechistas. Al tiempo.

Pues bien, para que Ud. pueda juzgar por si mismo, analice el texto del acuerdo alcanzado entre Mas y ZP y encontrará esos puntos de tensión con la Constitución a los que se refiere el Consejo de Estado