La valoración total de los activos asciende a más de 2.000 millones de eurosEl Banco Popular ha amortizado 70 oficinas en el primer semestre y otras 48 en el segundo. Es el resultado del proceso de concentración, que seguirá en el futuro con más de 100 oficinas adicionales. Mucho de ese personal se ha reciclado en las oficinas redundantes. Pero 317 profesionales se están dedicando a la gestión de la morosidad. Lo llaman departamento de recuperaciones. En el 49% se produce la recuperación por pago. En un 11,9% por compra del bien hipotecado y en el 20% por refinanciación, lo que explica el crecimiento de la actividad crediticia en un 5%.

Pues bien, de ese 11,9% de compra de activos, nace, o más bien resucita, la división inmobiliaria del Banco Popular. La dirige Pedro Rodera, ex consejero delegado de Realia. Y ya están conrtratando arquitectos y profesionales para dotarla de estructura suficiente. La valoración conjunta de los activos es de 2.000 millones de euros, de los que la mitad son suelo y del suelo, el 95% es urbanizado o urbanizable; sólo el 5% es rural. Los bienes están escriturados a precios de mercado actual, pero suponen cerca de un 35% menos que su valoración antes de la crisis, lo que no significa que hayamos tenido una minusvalía del 35%, matiza el director general corporativo del Banco Popular, Jacobo González-Robatto.

¿Y qué harán con esos inmuebles? Aguantar. Como todos los inmobiliarios. No van a malvender. No tienen prisa, están convencidos de que son buenos activos y que no tienen por qué malvenderlos. Además, nos hemos dado cuenta de que la gente es insensible a la bajada de precios; hay mucho buscachollos, apunta González-Robatto.

No obstante, el director general Corporativo, se muestra partidario -a título personal- de rebajas fiscales que movilicen el mercado. Señala que con los automóviles se ha demostrado la sensibilidad de la demanda a los estímulos fiscales y considera que con el 'ladrillo' el efecto sería similar. Considera además que no habría merma de recaudación porque se incrementaría la actividad. Pero eso siempre a título personal. Más que nada porque prefiere no meterse en política. En primer lugar por mostrarse amigo personal de Campa. Y en segundo lugar porque hasta ha llegado a señalar que hay signos de desaceleración en la caída. Poderoso caballero es don Gobierno.