La filosofía: "Que cada palo aguante su vela"

España es firmante del Concordato del Comité de Basilea. Dicho concordato establece que las filiales bancarias de los grupos internacionales son supervisadas en el país de acogida, mientras que el consolidado es examinado por el país de origen. Pero además, España ha firmado acuerdos de colaboración con varias entidades: 9 de América, 7 de la Unión Europea y una de Asía. "La semana pasada firmamos un acuerdo de colaboración con Puerto Rico", señaló el pasado viernes el subgobernador del Banco de España, José Viñals.

Además, Viñals se congratula de que la internacionalización de la banca española se hiciera sobre las bases de la financiación autónoma de los negocios, cubriendo los riesgos del mercado nacional en cada caso. Es decir, "la autonomía financiera de las filiales". O dicho de otra manera: "Que cada palo aguante su vela".

De esta manera, los riesgos de la internacionalización de la banca española no se transmitían a sus matrices. Porque el salto o la aventura internacional sólo se realizó cuando existían "sólidos cimientos" nacionales. Pero es que además, la filosofía del palo y de la vela, permite que cuando un banco tiene problemas se suelten amarras. Y así, cuando se produjo el default en Argentina, muchos ahorradores pidieron que fueran las matrices las que respondieran de sus filiales "australes". La filosofía del Concordato de Basilea operó. "Que cada palo aguante su vela". Y aguantaron. Vaya si aguantaron.