El diferencial del tipo de interés alemán del bono español a diez años sube como la espuma del Oktoberfest (fiesta de la cerveza)

 

En septiembre de 2009 era del 051%; un año después es del 185%. El aumento de la oferta de deuda conlleva una subida del tipo de interés.

El diferencial de la deuda, con el bono alemán como referencia, es el baremo más utilizado en los mercados financieros para evaluar la situación de un país. Por lo general, una economía fuerte y saneada cuenta con la confianza de los mercados, por lo que puede ofrecer una rentabilidad más baja a su deuda porque los mercados la comprarán con tranquilidad. Sin embargo, una economía débil, se ve abocada a ofrecer una rentabilidad más alta para que los mercados extranjeros se decidan a comprar la deuda de un país. Y aquí es donde se encuentra España.

La deuda bruta de España con respecto al resto del mundo ha pasado del 42,8% del PIB en 1995 al 166,6% en julio-agosto del 2010, mientras que 5,1% de deuda neta lo ha hecho del 5,1% al 89,7% en el mismo tiempo. España sólo se ve superada por Grecia y Portugal, y está cerca Irlanda. Como dice Juan Velarde, España parece haberse lanzado a que el nudo corredizo (que la está ahogando) prosiga su avance.

España está presa por un nudo gordiano que la atenaza, pero no parece que haya un Alejandro Magno que se decida a meter mano al asunto. Mientras no suceda, España seguirá agonizando.

Para su interés, reproducimos el artículo del economista Juan Velarde en ABC.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com