Que el Parlamento Europeo haya rechazado la aprobación del Informe sobre salud sexual y reproductiva, conocido como Informe Estrela, es motivo para congratularnos.
Dicho informe proponía que el Estado se inmiscuyera en el derecho de los padres a la educación sexual de sus hijos, la restricción de la libertad de conciencia, así como la promoción de la ideología de género.
Cabe entender que bajo el eufemismo "salud sexual y reproductiva", se esconde la promoción del aborto y su presentación como un supuesto derecho humano. Este informe, finalmente rechazado, es un ataque directo para acabar con la libertad de conciencia.
Ante propuestas como estas es necesario urgir al partido en el Gobierno de España a que no retrase más este tema de crucial importancia y, tal como defendía en su programa electoral, derogue la actual Ley del Aborto y presente una nueva ley que defienda el principal de los derechos: el derecho a la vida del ser humano desde su concepción, el derecho a la objeción de conciencia así como el derecho fundamental de los padres a educar a sus hijos según sus convicciones.
Recordemos que la vida y la educación son derechos prioritarios del ser humano y no concesiones del Estado.
Lluis Esquena Romaguera
