La información que publicaba el lunes 7 elconfidencialdigital.com sobre la entrevista "secreta" entre José Luis Rodríguez Zapatero y Josu Jon Imaz ha causado gran revuelo en ambientes políticos. La estrategia del Gobierno ha sido restar importancia al encuentro y negar su carácter secreto. "Todas las actividades del presidente son públicas, algunas más públicas que otras, pero todas públicas", señalaba la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en la tertulia matutina de Telemadrid, en la mañana del martes 8.
La vicepresidenta quita hierro al encuentro, que califica de "poco importante" y "normal". "No tiene ninguna trascendencia, de verdad", concluye. Además, De la Vega sale al paso de las especulaciones afirmando que Zapatero sólo habló de lo que posteriormente dijo en el Congreso de los Diputados en relación al Plan Ibarretxe. La portavoz del Ejecutivo negó que hubiera las condiciones para mantener contactos con Batasuna o ETA, y aprovechó para señalar que el Plan Ibarretxe estaba "muerto" y "ha pasado a mejor vida".
Además, De la Vega apeló a la "fortaleza" de las instituciones para hacer cumplir la ley e informó que si fuera necesaria la intervención de las Fuerzas de Seguridad o el recurso al Tribunal Constitucional "se haría". Por eso, considera que existen suficientes instrumentos para combatir el referéndum ilegal, que no es necesario su inclusión en el Código Penal.
En cuanto a la posibilidad de que Batasuna se presente por las listas de Aralar, la vicepresidenta elude responder afirmando que "la Ley de Partidos se ha demostrado suficiente".
