Menos mal que no quería entrar en polémicas. Porque la vicepresidenta no está dispuesta a que nadie piense que el gobierno ha dejado tirados a los canarios ni a los canarios. Estamos trabajando y trabajamos todos los días, señala. Ya, pero desde el gobierno canario se critican no las medidas sino la lentitud en que se aplican, le replica un plumífero canario. Las patrulleras no se improvisan y hemos tardado 58 días en poner a disposición las patrulleras; yo creo que es un tiempo record, responde la vice.

Y frente a los ataques del gobierno canarios, reacción. De las Vega ha lanzado un mensaje de agradecimiento a la ciudadanía canaria por la generosidad y responsabilidad con la que están afrontando el problema migratorio. Ellos lo sufren directamente mientras que nosotros lo vemos en televisión. También ha agradecido la labor que realizan las ONG, especialmente la Cruz Roja, y las patrullas de salvamento marítimo.

Se le olvidó citar a las Fuerzas de Seguridad del Estado. Quizás porque no le haya gustado que la Agrupación de Guardias Civiles se haya quejado por la falta de recursos humanos destinados al problema de la inmigración en relación a los destinados a la Copa América. No voy a entrar en ese tema, responde la vicepresidenta.

Por otra parte, De la Vega reconoce la dificultad de la expatriación de los ilegales y no quiere ofrecer excesiva información sobre la cifra de inmigrantes repatriados. No obstante, se enorgullece de ser el país europeo que más inmigrantes logra repatriar. En Francia tienen 60.000 ciudadanos de Malí que no los consiguen repatriar. El problema, según explica, es que la Unión Africana no quiere las repatriaciones porque sus opiniones públicas no se lo permiten además de que los inmigrantes suponen una fuente de ingresos para estos países. Somos la frontera de un continente que se está muriendo de hambre, reconoce. No le gusta a De la Vega hablar de continente pobre, sino empobrecido. Ya saben, las potencias coloniales son las responsables de la pobreza africana. Y encima, el Vaticano no hace nada por África, según la vicepresidenta.

El Gobierno sí hace. Se ha puesto manos a la obra y ha aprobado el pomposo Plan África que durará 3 años y tiene una dotación presupuestaria de 7 millones para este 2006, además del alivio de la deuda por 550 millones de euros a los que hay que sumar 800 millones de euros que serán condonados en el marco de la relación multilateral. Y para que vean la humildad de este Gobierno, De la Vega considera que este plan nos colocará como uno de los principales actores internacionales en África y en el mundo.