Sr. Director:
No es normal, mejor dicho, es inusual, que una entrevista entre Rajoy y Rubalcaba dure cuatro horas.

 

Esto apunta a que se trató de un encuentro con contenido. La voluntad de entendimiento entre el Gobierno y el PSOE en política exterior, defensa y antiterrorismo es propia de una democracia madura. Hubo sintonía en varios asuntos -Grecia y reforma financiera- y desacuerdos -reforma laboral o aborto-, además del compromiso de renovar los órganos institucionales pendientes antes del verano.

El discurso de Rubalcaba fue correcto. La duda es que no casa con los primeros pasos de su oposición. ¿No será que lo que busca es contentar a todos especialmente a los más radicales de su partido? ¿Cambiará el tono después de las elecciones andaluzas y asturianas?

Suso do Madrid