Sr. Director:
Según el diccionario de la RAE el vocablo fuera tiene dos acepciones: como interjección=¡fuera de aquí! o como adverbio=coloca fuera. Me refiero a este 2º sentido en mi escrito.

 

Dado que el PSOE, a instancias de ERC-IU-ICV, piden al Gobierno que retire los crucifijos de las escuelas, en aras de un belicismo y laicismo intolerante, que ofende los sentimientos más íntimos de los cristianos, católicos etc., es de  esperar se organice una reacción masiva y contundente por doquier, de todos los citados y demás afectados, para exteriorizar el desagrado por tan injusta medida.

Al quitar de las paredes de los centros el signo de paz, perdón e identidad cristiana, cada uno sea portador de este signo de la cruz en su persona, en su pecho, cuello, solapa, o en su frente etc.

Desde la sencilla cruz o Tau franciscana, la cruz de Caravaca, la cruz relicario, la cruz con cadena al cuello,  el Cristo de Dalí en casa, en foto o dibujo, etc. todo puede valer para exteriorizar nuestro amor a Cristo Jesús y nuestro malestar y protesta. En los parabrisas de los coches, en pegatinas en la ropa o los rosarios de mano se puede reparar la gratuita ofensa al Señor.

¡Basta ya de tanto sectarismo! ¡Cristianos, llevemos la cruz  en el  corazón y  donde nadie nos la pueda quitar!

Miguel Rivilla San Martín